jueves, 9 de mayo de 2013
Tomado de El Expreso del Sur
Cualquier día, en cualquier esquina y en
cualquier lugar de esta turística ciudad caribeña, se puede uno encontrar con
este individuo que anda por las calles así como se ve en las fotos. Por
delicadeza y pudor social no la publicamos de frente, pero ya ustedes se lo
pueden imaginar, porque así es que anda él como ustedes se lo imaginan.
Lo grande del caso es que los ciudadanos y
las ciudadanas, en vez de sentir vergüenza ajena, unos se echan a reír
ante descomunal desconsideración a la moral pública, otros a observar
indiferentes, y los que son más, a preocuparse por la situación.
Hemos visto autoridades pasarles indiferentes
por el lado al individuo, y en ocasiones he llegado a pensar que se tomarían
medidas, pero no, sigue campante y sonante como "si tal manguera",
como dice el pueblo.
Somos de opinión que alguna autoridad
debería tomar "carta en el asunto" y sacar de las calles a alguien,
que aunque enajenado mental, es una vergüenza y un atentado al pudor público.
Ojalá que alguien escuche esta voz.