miércoles, 25 de agosto de 2010

EN RELEVO Leonel y su muchacho malo

Perla del Sur Digital publica un articulo escrito por Oscar Medina en el Listin Diario sobre la relacion del Presidente de la Republica con un funcionario de su entera confianza que, aunque el autor no lo dice, los lectores saben que es Felix Bautista.

Oscar Medina
oscarmedina1974@gmail.com
Pienso que la mayoría de los dominicanos hemos visto o escuchado casos como el del hombre serio y respetado en el barrio y en el pueblo, a quien le sale un hijo malo. Un muchacho que hace maldades en el vecindario, irrespeta a los mayores y comete fechorías ante los ojos de todos. Sin embargo, cuando le van a dar la queja al viejo, este lo defiende a capa y espada. Y es que es débil con su muchacho. Y el carajito, conocedor de las debilidades del “pai”, lo utiliza y lo manipula, y le jura que es que “se la han cogido con él” y “que le tienen envidia”.


Y el viejo le cree, o prefiere creerle. Y así, ante la falta de sanciones o amonestaciones del viejo, lo que era un muchacho jodón acaba por convertirse en un hombre dañado. Para lástima del padre, que por apoyar al vástago, acaba perdiendo el respeto, la credibilidad y la consideración de la comunidad. Apliquemos esa figura a Leonel Fernández. Un hombre de éxito, que ha ocupado en tres ocasiones la Presidencia de la República, y a quien le adornan condiciones excepcionales. Es prudente, cauto, respetuoso, decente, preparado e inteligente, y con un talento político que le ha catapultado al liderazgo del Partido de la Liberación Dominicana ñhoy por hoy la principal fuerza política del paísñ y le ha ganado el respeto y admiración de sus compañeros, algunos de los cuales antes siguieron, nada más y nada menos que a un líder de la categoría y la dimensión del profesor Juan Bosch. Pero a Leonel le pasó como al viejo, y le ha salido su muchacho malo con el cual es débil.



Y defendiéndolo está poniendo en juego todo lo ganado. Pues condicionado a la voluntad y a los intereses de un colaborador, a quien define como “carne de su carne”, luce indeciso ante el país, el gobierno y su partido. Y lo que es peor, ante todos se muestra reducido a la categoría política e intelectual de ese individuo, quien sin las dimensiones del líder, se aprovecha de su flojedad hacia él, y le conduce a incurrir en errores incomprensibles. Y es que un hombre como Leonel no puede pasar por alto, que a pesar de ser “de los probados”, no todo lo que hace o sugiere este individuo es para su bien o el de su gobierno. ¿O va a esperar que le pase como al viejo? Que por defender a ese muchacho perdió el respeto de los vecinos y del pueblo. Quiera Dios que no.